¿Sabías que la alimentación influye en el desarrollo del habla del niño? Sí, aunque a primera vista pareciera no tener relación, ¡tienen mucho que ver! Y es que una alimentación variada en texturas, durezas, tamaños y sabores ayudarán a nuestros niños a tener un adecuado desarrollo del habla. En el siguiente articulo Clémentine & Bastièn te cuenta todo lo que debes saber.
La relación entre la alimentación y el desarrollo del habla de los niños
Para conocer cómo se produce esta relación alimentación–desarrollo del habla, empecemos por revisar cómo ocurre la deglución, ese proceso que llamamos comer.
Partimos de un reconocimiento del alimento que tenemos enfrente. Ese reconocimiento lo hacemos mediante la visión y el olfato, que envían información a los centros corticales. Entonces, en ese momento se comienza a producir la saliva y se activan los patrones de masticación y control del bolo alimenticio.
Luego entramos en la fase del reflejo voluntario de masticación, donde se muelen los alimentos y los mezclamos con saliva para producir el bolo alimenticio. Éste irá a la parte posterior de la lengua y desencadenará el reflejo deglutorio para, finalmente, pasar a transportar ese bolo alimenticio desde el esfínter esofágico superior hacia el estómago.
En este proceso, descrito a grandes rasgos, interviene todo nuestro sistema orofacial, compuesto por las estructuras y musculaturas que se encargan de la respiración, la succión, la deglución, el habla y la fonación. Entre ellos podemos distinguir:
✓ Músculos faciales (maseteros, pterigoideos, temporal, digástrico, estilohiodeo, milohioideo, geniohiodeo).
✓ Músculos orbicular y bucinador de los labios, responsables del sellado de los labios y participantes activos en la masticación.
✓ Lengua.
✓ Paladar (duro y blando).
✓ Mandíbula.
✓ Hueso hioides.
✓ Nervios craneales (trigémino, facial, glosofaríngeo, vago, hipogloso y espinal – cervical).
Estas estructuras también intervienen en los procesos de fonación, puesto que el desarrollo del habla no se trata solo de aprender palabras sino también requiere de la fuerza y coordinación de diversos órganos para articular correctamente los sonidos que se transformarán en palabras.
La alimentación es un gran proceso biopsicosocial, ya que comprende a la función sensorio-motora, maduración neurológica, cognición, emoción e interacción humana. El desarrollo de las habilidades de alimentación está muy influido por otros aspectos del desarrollo, como habilidades motoras, cognitivas y sociales.
Qué alimentos promueven la función masticatoria del bebé
Cuando iniciamos la alimentación complementaria de nuestro bebé es el momento oportuno para comenzar a fortalecer estas estructuras. Si las mismas no se encuentran a tono, pueden presentarse alteraciones tanto en la función deglutoria como en el habla.
Por ejemplo, en ambos se requiere de un buen sellado labial. En la función deglutoria, para que los alimentos no se escapen de la boca; y, en el habla, para la correcta articulación de los sonidos con componente bilabial o labiodental (ejemplo, la pronunciación de la letra m).
Así mismo, los movimientos linguales, necesarios en la formación del bolo alimenticio y su traslado hacia la faringe, también se requieren para la correcta articulación de sonidos con componentes alveolar, gutural, fricativo, vibrante, entre otros (ejemplo, la pronunciación de la letra r).
La masticación se realiza en un movimiento de rotación que fortalece los músculos de su mandíbula, la boca, la lengua y toda su cara. Si se alimenta solo de licuados y papillas, no se desarrolla la masticación o se desarrolla muy poco, ya que solo requerirá utilizar movimientos de apertura y cierre. Esto producirá un menor desarrollo de su sistema orofacial, presentando maloclusiones y haciendo más tardía o lenta su correcta comunicación verbal.
Por ello, a la hora de alimentar al bebé, no solo debemos hacer énfasis en que el bebé reciba una alimentación sana y balanceada que, obviamente, es muy importante, también debemos ofrecer estos alimentos en diferentes texturas (zanahorias, manzanas, pan de barra…). Éstas promoverán la función masticatoria y evitará deficiencias en el desarrollo de los órganos fonadores. En casos extremos de estas deficiencias, puede llegarse a necesitar rehabilitación para el desarrollo de tal musculatura.
También es importante que te olvides de las prisas a la hora de comer, deja que tu bebé se tome su tiempo para masticar sus alimentos. De esta manera lo ayudas a desarrollar una buena masticación y una correcta coordinación de la estructura ósea y muscular que él /ella requiere para el desarrollo del habla.
Consejos para ayudarle a masticar
✓ En torno a los siete u ocho meses del bebé, los niños son capaces de masticar. Empieza ofreciéndole al final de la teta, cuando ya esté saciado, una cucharadita de fruta rallada y déjalo que experimente con tranquilidad. Para él será como un juego.
✓ No hay que insistir y ofrecerle alimentos sólidos a toda costa, especialmente cuando el niño está muy hambriento.
✓ Si rechaza los alimentos sólidos con trocitos, quizás aún no ha llegado el momento. No hay que insistir y se debe retrasar su introducción algunas semanas, de modo que no se cree una tensión relacionada con el momento de la comida. Después del rechazo, también se puede intentar darle la papilla en el biberón, agrandando el agujero de la tetina y volver a intentarlo, sin presiones, después del algún tiempo.
✓ El pequeño debe aprender a ingerir de una forma nueva. Por tanto, no hay que introducirle demasiado alimento en la boca, quizás aprovechando los momentos en que está distraído.
✓ Durante la salida de los primeros dientes, muchos niños sienten una imperiosa necesidad de morder cualquier objeto que consiguen coger. Este deseo debe satisfacerse, puesto que alivia las molestias de las encías y favorece la salida del diente. Es más, en el momento en que un bebé es capaz de llevarse un alimento a la boca, se le debe animar a masticarlo, procurando, no obstante, que no se trate de bocados demasiado grandes, que podría tragarse enteros.
Puedes leer más artículos similares a ¿Cómo la alimentación influye en el desarrollo del habla de los niños? en el Blog de Clémentine & Bastièn!
Fuente: Guía Infantil.