La zanahoria es una buena fuente de diversas vitaminas, minerales e hidratos de carbono, por lo que proporciona energía a tu bebé. Además, aporta vitamina E, folatos, ácido ascórbico (vitamina C) y vitaminas del complejo B, como la niacina. El día de hoy compartimos esta receta súper fácil de papilla de zanahoria, mango y pera para preparar en tu procesador de alimentos Babycook de Béaba.
Una porción de 64 gramos (g) de zanahoria contiene 28 calorías, 2 g de fibra, 1,800 miligramos (mg) de vitamina A, 207 mg de potasio y cantidades moderadas de folatos, vitamina E, vitamina K, fósforo, magnesio, yodo y calcio.
De 7 meses en adelante / 4 porciones
Ingredientes
1 zanahoria
1/2 mango
1 manzana
1 palito de canela
1 chorrito de leche materna opcional
Instrucciones
1.Colocar todos los ingredientes pelados, en la canasta de vapor del Babycook.
2.Echar agua hasta el nivel 3 del Babycook y empezar a cocinar.
3.Retirar el agua de la cocción y el palito de canela.
4.Colocar todos los ingredientes cocidos en el vaso del Babycook, añadir la leche materna o el agua de la cocción, hasta lograr la consistencia deseada.
¡Servir y disfrutar!
Notas de receta
Consulta siempre con tu pediatra antes de introducir nuevos alimentos en la dieta de tu bebé.
Para aquellos interesados en saber un poco más …
Zanahoria
¿Cuándo se le puede dar zanahoria a un bebé?
La zanahoria se suele introducir a los seis o siete meses en la alimentación del bebé.
Algunas ventajas de su consumo es que durante el crecimiento favorece el desarrollo de huesos.
Al tener los pigmentos carotenoides se satisface las necesidades de vitamina A en el organismo, la cual es esencial para el correcto funcionamiento del sistema inmune.
Por su excelente aporte de fibra, previene el estreñimiento, contribuye a controlar los niveles de azúcar en la sangre, es un diurético natural y puede ayudar a reducir molestias gástricas y el exceso de acidez.
Por ser rica en antioxidantes, su consumo previene el cáncer y combate problemas visuales como cataratas, sequedad ocular, conjuntivitis y ceguera nocturna.
Además, es un alimento bajo en calorías, por lo que puede formar parte de dietas equilibradas y balanceadas, y es comúnmente incluida en planes de alimentación para bajar de peso.
Diversos estudios han encontrado que el consumo de zanahorias durante la lactancia mejora la calidad biológica de la leche materna.
Mango
¿Cuándo dar mango a un bebé?
El mango puede introducirse en la dieta del bebé a partir de los 6 meses, pero por tener un sabor demasiado dulce hay quienes recomiendan retrasarlo un poco y ofrecer antes otras frutas para que el bebé no se acostumbre a este tipo de sabores.
Múltiples propiedades
Es rico en aminoácidos, vitaminas C y E, flavonoides, beta-caroteno, niacina, calcio, hierro, magnesio y el potasio. De hecho, se estima que una sola pieza de mango de aproximadamente 200 gramos puede aportar unos 60 mg de vitamina C y hasta 35 mg de vitamina A.
El mango es una de las frutas más ricas en nutrientes y vitaminas, prueba de ello es que 200 gramos de mango aporta 2.3 gramos de vitamina E. Esto representa un 23% de la dosis diaria recomendada por expertos. Además, proporciona el 10% de la dosis diaria recomendada de magnesio y potasio.
Lucha contra el cáncer
Los fenoles en los mangos, como la quercetina, isoquercitrin, astragalin, fisetina, ácido gálico y las enzimas tienen abundantes capacidades de prevención del cáncer. También son ricos en fibra dietética soluble conocida como pectina.
Cuidado de la vista
La vitamina A es necesaria, ya que promueve la buena visión. La razón de esta afirmación es que se considera que la deficiencia de esta vitamina puede conducir a la ceguera.
Comerlo regularmente previene la ceguera nocturna, los errores de refracción, el ojo seco, el ablandamiento de la córnea, la picazón y ardor en los ojos. Además, el consumo regular de mango, reduce el riesgo de sufrir de degeneración muscular por ciptoxantina.
Manzana
La manzana tiene mucha fibra
De cada 100 gramos de manzana, 2,4 son de fibra, mientras que los melocotones, por ejemplo, sólo tienen alrededor de 1 gramo.
Con efecto saciante
Cuando la pectina, que es la sustancia que se encuentra en la pulpa blanca o amarillenta, llega hasta el estómago, desencadena unos mecanismos de información que transmiten al cerebro la orden de que ya está lleno. La presencia de pectinas en la dieta también puede tener efectos beneficiosos sobre los niveles de colesterol en sangre.
Es drenante
Un estudio sobre la manzana realizado por el departamento de Nutrición de la Universidad de Florida (EE UU), revela que la pectina y los antioxidantes que tiene la manzana en la piel ayudan a eliminar toxinas.
Protege el corazón
Las investigaciones más recientes, han evaluado los efectos cardioprotectores a largo plazo del consumo diario. También disminuye en fuertes cantidades el llamado colesterol malo.
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¡Ideal también para cocinar, calentar, triturar y hasta descongelar los alimentos!
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