Alentando a los niños a jugar solos

Alentando a los niños a jugar solos

Muchos padres piensan que los niños tienen que ser entretenidos y estimulados todo el tiempo.

El problema con este pensamiento es que se les enseña a los niños a depender del adulto para entretenerse y aprenden a no poder hacer muchas cosas solos.

Cuando en realidad, para un niño, no existe un espacio más enriquecedor que aquel que se le otorga para jugar solo.

El juego es lo más positivo para un niño; cuando se le permite descubrir sólo es maravilloso pues exploran a su ritmo, siguen su propia intuición lo que los lleva a irse conociendo.
Desarrollan la concentración al ser ellos los que eligen la actividad en la que involucran; son ellos los que deciden cuánto tiempo emplean en ella y en qué momento pasan a otra cosa.
Pueden estar en silencio o no.

La mayoría de adultos cree que los niños deben estar expresándose constantemente mientras juegan, si no lo hacen el estímulo se vuelve cada vez mayor para lograr alguna muestra de alegría.

El juego a solas se convierte en un momento creativo, es sano y terapéutico para un niño no estar bajo algún estímulo para el que quizá no esté listo o dispuesto en un determinando momento.

El juego a solas es un regalo ya que se le transmite al niño una total confianza en sus habilidades, en su capacidad de descubrir y un respeto por su autonomía y espacio.
Es muy importante no interrumpir a un niño cuando está involucrado en alguna actividad, conforme vaya creciendo, estos momentos serán cada vez más y más largos ya que irá creciendo su capacidad de concentración por espacios mayores.

Para lograr que un niño juegue solo, es importante darle un espacio físico seguro, con juguetes no estructurados para que puedan jugar a descubrir.
Los muebles bajos son ideales para el desarrollo de la autonomía, al niño le dará seguridad poder alcanzar los juguetes sin tener que pedírselos a un adulto.
Intentar crear un espacio con colores neutros; los espacios llenos de color y de juguetes de mil colores generan un estímulo visual que para un niño puede ser difícil de procesar.

El espacio debe estar limitado para que no se vayan por toda la casa, y ser seguro para saber que no les sucederá nada mientas están solos.

A un bebé se le puede enseñar a estar sólo desde pequeño, se le puede dejar sólo con algún juguetito en mano mientras el adulto hace alguna otra cosa.
Luego, cuando se sientan o se empiezan a mover, dejarlos para explorar su cuerpo, ir midiéndose e ir alcanzando nuevas metas en su desarrollo.
Explicarle a un bebé “mamá ahora vuelve” les da confianza y tranquilidad, saben que si se quedan solos un ratito no pasa nada pues el adulto siempre regresa.
Naturalmente que el tiempo irá creciendo conforme van creciendo los bebés y los espacios se irán haciendo cada vez más prolongados.

Es importante también acercarte sigilosamente a observar mientras un niño juega sólo, es increíble verlos.  Por ejemplo, cuando dejas sólo a un niño que quiere gatear, se le da la oportunidad de explorar con su cuerpo, acércate y lo verás intentando, hasta que un día, lo habrá logrado por sí mismo y será uno de sus primeros logros gracias a la confianza de sus cuidadores.

Escrito por: Maria Paz Zamorano

Fundadora Clémentine & Bastièn

alentando ninos jugar solos

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Cerrar

Carrito (0)

Cart is empty No hay productos en tu carrito

Clémentine & Bastièn

Tienda de productos para bebes